La primer realidad del elefante es estar atado a una robusta estaca transcurriendo sus primeros dias forcejeando para liberarse.
No pudiendo obtener su libertad instintiva, pierde toda esperanza.
Su castigo de ser elefante se empieza a convertir en su realidad y, como muchos otros, la acepta sin culpa.
Todos sabemos que este animal se destaca por su fuerza y su memoria. Entonces nos preguntamos por que, al crecer y al adquirir mas fuerza no tironea por ultima vez esa maldita estaca y listo.Claro está que su traicionera memoria le recuerda que alguna vez "no pudo" y si le sumamos que acepto su realidad de estar atado poco probable es que vuelva a intentarlo.
Hoy el elefante, feliz de que lo bañen y alimenten diariamente, disfruta de su vida sin ninguna razón.
